Todos necesitamos una motivación para seguir el día a día de nuestras vidas. Pero esa motivación, no siempre la tenemos a mano, ¿verdad? Caer en la apatía es algo común. La rutina deja de tener sentido cuando hay falta de motivación, los ambientes ordinarios se convierten en cárceles. Y cuesta horrores encontrar las fuerzas ya no para ir al trabajo o manejar a los críos: faltan incluso para levantarse de la cama.
Bien, esto puede pasar, es común, pero no significa que debamos dejarlo correr. Si estás en uno de esos episodios, es hora de acabar con la apatía. Ya te avanzamos que vas a conseguirlo. Pero para echarte una mano, aquí tienes 5 ideas que te ayudarán en la batalla.
Los Momentos Paréntesis
La vida diaria deja pocos momentos para uno mismo. Estudiar y trabajar; tener hijos y trabajar; estudiar, tener hijos y trabajar… la lista puede seguir creciendo. No paras. La rutina de lunes a viernes es un disparate y el fin de semana se te escurre entre compromisos y tareas domésticas.
Pero no eres un robot. Puedes funcionar como una máquina durante un tiempo, pero no durante todo el tiempo: al final tu subconsciente abandona, hasta el gorro.
Por eso los paréntesis tienen tanto valor. No estarás en disposición de dejarlo todo e irte a dar la vuelta al mundo en una caravana (¿o sí?), pero sí puedes dedicarte un rato cada día. Un rato para ti en exclusiva, para hacer solamente aquello que te apetezca. Pensar, leer un libro, ver una serie, hacer yoga, salir a correr, jugar a un juego de ordenador o consola, ir a ayudar a la protectora de animales local… Dos horas, media hora, lo que puedas sacar. Necesitas dormir, pero robarle media horita al sueño para hacer algo placentero te hará más bien que mal.
Tendrás que hacer más cosas para resolver la falta de motivación, pero dedicarte un Momento Paréntesis es un buen comienzo.
Las comparaciones son odiosas
Estudios recientes han asociado el uso de redes sociales con la apatía, la falta de motivación, y en última instancia con problemas psicológicos. Estar pendientes de las vidas de otros nos roba tiempo para estar pendientes de la nuestra, y además en las RRSS las vidas de todos parecen geniales. Pies en la playa, gin-tonics con pepino, viajes estupendos, caras sonrientes.
Las redes no son el problema, claro, solo son la cara digital del problema real: compararnos con los demás. La felicidad y el éxito de otros resaltan tu infelicidad o tu estancamiento. Las metas que alcanzan son las que tú no estás alcanzando.
Esto es un veneno para la psique, y lo sabes. Porque ni las vidas de los demás son tan geniales, ni tu felicidad depende de ellos. Será mejor dedicarte más tiempo a ti y tus objetivos y menos a las supuestamente envidiables vidas de los demás.
El deporte va más allá del músculo
Los beneficios psicológicos del deporte están más que demostrados. Practicar algún deporte reduce los niveles de estrés y estimula nuestro cerebro para producir neurotransmisores como la dopamina, que están directamente relacionados con el estado de ánimo.
La dopamina se ha considerado tradicionalmente como el neurotransmisor del placer y la recompensa, y sin embargo los últimos estudios apuntan en otra dirección: parece estar ligada de forma directa con la motivación. Es una hormona que nos empuja a hacer las cosas.
Su falta se asocia a estos episodios de apatía, así que, ¿por qué no practicar alguna actividad que la libere?
¡Quizá ese Momento Paréntesis debas invertirlo en ir a la piscina o salir a correr!
¿Es la hora de nuevos retos?
Más allá de los remedios sobre la marcha, y de los truquitos para sortear esos episodios de falta de motivación, a veces uno necesita hacer una reflexión general sobre su vida. Otro de esos Momentos Paréntesis puedes dedicarlo perfectamente a pensar en ti y en cómo van las cosas.
A si estás haciendo lo que quieres hacer.
A preguntarte si ha llegado la hora de un cambio profundo en tu vida personal o profesional.
Pueden ser preguntas incómodas, pero encontrar nuevos retos y objetivos para tu vida si no estás satisfecho con ella, es esencial para salir de la apatía y cargarse de motivación.
Déjate ayudar
Todos necesitamos ayuda y no hay nada malo en ello. Y esta ayuda puede venir por todos los frentes, ¡no te cierres a nada!
Hablar con confianza es lo primero, no hallarás causas a tu desmotivación si no puedes verbalizarlas, y en eso tu pareja, tu familia o tus amigos van a ser una ayuda inestimable a la que debes acudir.
Pero no solo debes dejarte ayudar en lo psicológico. Lo fisiológico también es importante: si la falta de dopamina afecta a la motivación, la carencia de determinadas vitaminas o minerales puede afectar igual al rendimiento, restándonos fuerzas para seguir. ¿Cómo vencer la apatía si estamos agotados?
En estos casos un aporte nutricional como Astenolit-dinamic puede ser de gran ayuda: solo necesitas tomarlo durante 12 días, sus ingredientes cumplen funciones revitalizantes, y algunos de ellos, como las vitaminas del tipo B y el inositol, intervienen directamente en la síntesis de neurotransmisores como la serotonina.
Ayuda para tu psique y ayuda para tu cuerpo: todo es positivo si está encaminado a vencer la apatía y hacer desaparecer la falta de motivación de tu vida.
¿Qué Astenolit es el tuyo?
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